lunes, 21 de junio de 2010

"LA ENERGÍA DEL GUERRERO ESPIRITUAL Y EL OSO"

La energía del guerrero espiritual aplicada al desmantelamiento del ego toma dos formas: aferrarse y soltar/dejar ser.
El trabajo del guerrero se logra con autodisciplina, en última instancia una forma saludable de amor por uno mismo.

La autonegación -negación del ego- "no es negación de mí, sino del yo que se atraviesa en el camino", dice W. H. Auden.
El trabajo del guerrero espiritual se hace también simplemente sentándose, dejando ser.

La sincronía nos permite saber justamente cuándo aferrarnos o soltar: una serie de perdidas nos invita a soltar una serie de oportunidades nos anima a aferrarnos.
Un Oso sabe cuando luchar y abrirse camino hacia lo que quiere y cuándo acostarse y dejar que la naturaleza tome su curso somnoliento. Hace por instinto natural lo que nosotros hacemos por atención espiritual a la sincronía.

Observen la metáfora de la hibernación. El oso permanece en una cueva excavada por él de uno a cuatro meses, sin comer ni beber, ya que sobrevive con la grasa de su propio cuerpo, incluso reciclando sus desperdicios. Se despierta pesando un 25 por ciento menos de lo que pesaba cuando se acostó. ..

¿Puedo soltar yo esa cantidad de ego? ¿En vez de ello, quiero mantenerme en guardia y con pleno control y me niego a volverme acostar?

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